/p>Que la Dieta Mediterránea disminuye el riesgo cardiovascular es algo conocido, pero ahora el estudio PREDIMED (Prevención con Dieta Mediterránea), uno de los mayores estudios clínicos de nutrición que se han hecho en el mundo, ha analizado las mejoras que experimentan en su salud cognitiva las personas de entre 55 y 80 años que escogen Dieta Mediterránea como patrón alimenticio.
Geriatricarea frutos secos deterioro cognitivo
Los individuos que consumieron la dieta mediterránea suplementada con frutos secos mostraron una mejora significativa de la memoria

Tal y como explica el doctor Emilio Ros, Jefe de la Unidad de Lípidos del Hospital Clínic (Barcelona) y responsable de la intervención nutricional PREDIMED, “planteamos este sub-estudio porque había evidencias previas de estudios epidemiológicos de que una alimentación saludable, sobre todo un patrón de dieta de tipo mediterráneo o en consumo frecuente de frutos secos, podía influir de modo beneficioso en la cognición y prevenir el Alzheimer. De cualquier forma, existía una falta de un estudios clínicos, por lo cual el presente ensayo aleatorio controlado rellena este hueco y ofrece evidencias científicas de primer nivel”.
447 voluntarios de entre 55 y 80 años con alto riesgo cardiovascular pero con cognición normal participaron en el estudio PREDIMED y fueron sometidos a test neuropsicológicos al empezar y cerca de la finalización del estudio. Los participantes fueron asignados al azar a 3 dietas. Dos de ellas eran dietas de tipo mediterránea, una suplementada con aceite de oliva virgen extra y otra con frutos secos; y el tercer grupo fue asignado a una dieta baja en grasas.
Al finalizar el seguimiento, las personas que siguieron la dieta suplementada con frutos secos (un 50% nueces), mostraron una mejora significativa de la memoria comparados con el grupo de control. Además, se identificaron 37 casos de deterioro cognitivo leve: 17 en la dieta suplementada con aceite de oliva, 12 en el grupo control, y sólo 8 en la dieta suplementada con frutos secos.
Estos resultados, publicados en The Journal of the American Medical Association, sugieren que seguir una Dieta Mediterránea suplementada con frutos secos puede contrarrestar el deterioro cognitivo vinculado a la edad. Sus efectos beneficiosos probablemente residan en la abundancia de antioxidantes y agentes antiinflamatorios que ésta ofrece. Además, suplementarla con nueces (el único fruto seco con una cantidad significativa de ácidos grasos Omega-3 -2,5 g por 30 gramos- y particularmente ricas en polifenoles que contrarrestan la oxidación), podría mejorar la salud neurológica.
“El principal mensaje de nuestro estudio es que una dieta saludable como la mediterránea promueve un envejecimiento saludable y que nunca es tarde para cambiar la dieta y mejorar la salud”, afirma el doctor Ros.