“Hay experiencias interesantes de corresponsabilidad en procesos crónicos, como diabetes, anticoagulación, hipertensión, hipercolesterolemia, hospitalización domiciliaria…, pero queda un largo camino por recorrer y hacerlo lo mejor posible depende de la colaboración entre pacientes, profesionales y gestores”, señala el Dr. Tomás Mainar, especialista en Medicina de Familia y presidente del Foro Aragonés de Pacientes.
En este sentido, el Dr. Julio Sánchez-Álvarez, vicepresidente de la Sociedad de Medicina Interna de Aragón, Navarra, La Rioja y País Vasco (Somivran), subraya que “el hecho de asumir mayor responsabilidad implica aumentar los conocimientos sobre el proceso que sufren y esta circunstancia va a favorecer la cumplimentación terapéutica y la disminución del consumo de recursos: va a necesitar menos revisiones, estas serán más eficientes, se producirán menos descompensaciones y disminuirá el consumo farmacéutico”.
Sin embargo, coincide con el Dr. Mainar en que aún queda camino por recorrer. “Falta mucha formación en muchos pacientes y sobra paternalismo en algunos profesionales. No obstante, se han hecho grandes progresos por ambas partes: las asociaciones de pacientes están haciendo esfuerzos en la formación de sus asociados y a nivel médico se han producido notables cambios en la relación con el paciente”. Asimismo, la implantación de la corresponsabilidad también depende de las autoridades sanitarias. “Es preciso que sean conscientes de esta realidad y den pasos en este sentido, a nivel de educación poblacional, asesoría a profesionales y contemplando la necesidad de tiempo para establecer esta corresponsabilidad, especialmente a nivel de la atención primaria”, apunta Dr. Sánchez-Álvarez.
Por lo que respecta al colectivo médico, el vicepresidente de Somivran es consciente de que se están realizando numerosos esfuerzos en las distintas etapas educativas para formar a profesionales capacitados para la toma de decisiones compartida con el paciente. “Para la Sociedad Española de Medicina Interna es una competencia transversal de adquisición indispensable durante la formación como especialista y durante el desempeño profesional. De hecho, entre los Grupos de trabajo que conforman la SEMI existe un Grupo de Bioética y Profesionalismo, que trabaja en esta dirección. A este grupo se ha añadido recientemente otro, el Grupo de Educación en Salud para la Ciudadanía, cuya misión es mejorar el conocimiento de la población en ciencias de la salud y facilitar así la corresponsabilidad del paciente”, explica Sánchez-Álvarez.
Sin embargo, señala que la situación en España “es claramente mejorable, ya que a nivel de pacientes, tanto en formación como en organización, creo que estamos ligeramente retrasados”. Una crítica que comparte el Dr. Mainar, quien admite que “al haber llegado más tarde al desarrollo de políticas de formación para el empoderamiento de pacientes, nuestro país no está en el primer nivel a la hora de compartir responsabilidades”.
Ambos expertos coinciden también en la necesidad de poner al paciente en el centro del sistema sanitario y dotarle de medios para que la corresponsabilidad sea un hecho. “Deberíamos intentar que éste deje de ser simplemente un lema atractivo, para conseguir que sea la realidad en la que se desarrolle nuestra actividad profesional”, concluye el Dr. Sánchez-Álvarez.
1 Comment
Deja una respuesta
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *
[…] incrementar la formación de los médicos generalistas (Medicina Interna y Medicina de Familia), implicar a los pacientes en la toma de decisiones, promover el diálogo clínico y crear ámbitos de trabajo que favorezcan la evolución, la mejora […]